¿Por qué volvemos a jugar otra final en tan poco tiempo? 23/05/2016
El twittero @serpientedegas, la voz del hincha en Ciclón de Boedo, analiza la clasificación de San Lorenzo a la final del torneo.
Por: Damián Lluvero
Hay una pregunta mitad retórica, mitad no, que nos tenemos que hacer todos los hinchas de San Lorenzo durante esta semana. ¿Por qué volvemos a jugar otra final en tan poco tiempo? Es realmente importante y también saludable, detenerse un momento y respondernos de a poco cuales son las cosas que incidieron para que el domingo estemos a un paso de sumarnos otra estrella como club.
Los más esotéricos dirán que los astros se alinearon o que algún Dios se contagió de los colores y empezó a hacernos ganar partidos. Los necios dirán que siempre algo externo nos ayuda, y que ayer pasamos a otra final gracias a un grupo de sanjuaninos que recibieron unos pesos y optaron -de repente- por ganarle al equipo revelación de este torneo. En otra de las aristas se ubicarán los anti-Guede, predicando verborrágicos y pasionales, que este técnico no sabe nada, y que un día los jugadores decidieron que iban a revelarse y que harían dentro de la cancha lo que se le ocurra a Ortigoza y a Caruso. En otro rincón saltarán los exitistas, que con las manos manchadas de crítica temprana e intolerancia, alzarán la voz de que ahora somos un equipazo y 7 fechas atrás, cuerpo técnico y el 70% del plantel debían morir en una hoguera, por haber pecado de perdedores, en un futbol donde no está permitido equivocarse dos o tres veces seguidas.
Muchos grupos lucharán en foros y en charlas de café, diputándose la verdad absoluta de este misterio. Algunos, incluso nublados por el presente, se cambiarán de bando una y hasta dos veces al día. Y entre tanto fervor, y tanto grito dejarán de caer papelitos y vendrá alguno a contarnos que San Lorenzo quizás sea un poco de todo eso que habla en cada esquina, que no se puede mirar para otro lado obviando que hay siempre un poco de todo. Pero concluirá su hipótesis diciendo que este club se anota finales porque le dio una oportunidad a una dirigencia honesta que vino a cambiar al club, a hacerlo cada día más grande, a punta de responsabilidad y decisiones tomadas con el corazón y la cabeza. Agregará también que tanto jugadores como cuerpo técnico -de antes y de ahora- siempre priorizaron a San Lorenzo por encima de nombres puntuales, y que cuando se tuvo que agachar la cabeza por el bien del equipo, se lo hizo. Por último sentenciará que ningún equipo puede llegar a ninguna final sin el aliento incesante de una hinchada que juegue donde juegue y como juegue, siempre estará ahí, ansiosa y eufórica por abrazar los colores.